Había quedado intrigado y más
confundido las siguientes horas, el hecho que _______ se enojara con él, no
tenía nada que ver con su comportamiento.
¡No tenía por qué escaparse!, ni
mucho menos, volver a las andanzas de antes.
Le hubiera gustado decirle todo
aquello, y además volver a hablarle y volver a pedirle disculpas, aunque ella
le hubiera dejado en claro que no quería que le hablara. Pero ________ lo había
esquivado toda la tarde restante. La había visto sentada con Georg y Nay, se
había acercado animosamente y _______ había huido de ahí, diciendo una excusa
terriblemente mala. Luego la había visto otro par de veces más, por las
instalaciones del instituto, pero como si ella tuviera un radar, a penas él
comenzaba a acercarse, ella se escapaba ¡Así nunca iban a poder hablar!
Entonces cuando la vió en la
habitación horas más tarde, pensó que sería un bueno momento para hablar, pero
estaba muy equivocado, ¡Ella seguía evitándolo!
—¡Me podrías tomar atención!
-exclamó en un tono no tan alto, para que ella no pensara que estaba
gritándole- Llevo hablándote como idiota más de veinte minutos -y ella seguía,
ordenando su ropa, cepillando su cabello, mirando la ventana, todo menos
hablándole- ¡Te estas comportando como una niña eh! -exclamó nuevamente
mirándola desde su cama
—Primero que todo -habló ella
después de los segundos del monologo de Tom- Si tu hablas como mierda no es mi
problema, y segundo te dije que no quería que me hablaras, y otra cosa ¡No soy
una niña! -exclamó en el mismo tono que él- Deja de hablarme y molestarme, sólo
haz como si no existo ¿está bien? -se dio media vuelta y siguió ignorándolo.
Él quiso responderle que eso
nunca sería posible, pero ya no valía la pena.
"Mañana es la boda, amor,
supongo que no me dejarás abandonada, ¿cierto?
Te quiero"
Leah.
--
Ahora era un te quiero, antes
era te amo...
La maldita boda era mañana y ni
lo recordaba, ¿quién se casaba?
A si su prima, que ni si quiera
conocía, pero obviamente como él era el perrito faldero de la castaña, tenía
que ir.
A la mañana siguiente se rindió
totalmente, y dejó de insistir en arreglar las cosas con ________. Por lo que
se levantó callado, ni si quiera la miró y comenzó a arreglarse.
Lo mejor de que las chicas
-______ y Nay- supieran que ellos, no eran verdaderamente Kate Benson y Marie
Johnson, era que podían andar sin esas molestosas pelucas, podían vestirse como
chicos, y se sentían libres
—Tú y yo, debemos hablar -le
dijo Georg
—¿Te debo dinero? -bromeó algo
gracioso, siendo consiente que las dos chicas, lo escuchaban.
—Aparte -rodó los ojos y ambos
rieron- Pero debemos hablar de esto -levantó la peluca castaña- Tengo que
contarte cosas, como tú a mí, ¿puedes venir a mi casa hoy? -¡Claro que quería!,
pero lastimosamente no podía
—No puedo -murmuró demostrando
todo el agrado que no sentía- Estaré ocupado
—Siempre estas ocupado los fines
de semana -habló Georg, molestándolo
—Quizás este con su novia
-bromeó Nay, mientras entraba al baño
—No creo que sea Viviana-le
contestó Georg, y Tom inocientemente miró a _______, y se dio cuenta que ella
también lo estaba mirando.
Unos segundos mirandose, para
luego volver a lo que estaban haciendo...
—Bueno, el tema, es que hoy voy
a casa de ella -suspiró- Creo
—¿Reconciliación? -Georg lo miró
pícaro, notando el ambiente, entre su amigo y _______
—Boda -bufó, mientras miraba la
hora- No sé ni quien se casa, pero debo ir
—¿Tienes un traje de esos de pinguino?
-preguntó Georg
—No, debo ir al banco a ver si
aun me queda dinero y luego compraré un traje -se encogió de hombros
—Esta bien -Georg lo miró- ¿Me
prestas tu auto en la noche? -cambió de tema
—¿Y el tuyo?
—A mi padre se le averió el
auto, me pidió el mío y quedé sin transporte, quise pedirle la moto a Robert,
pero viajó a ver a su novia, ¿me lo prestas?
—Claro -le sonrió y nuevamente
miró a _______ que estaba en la ventana observando el día nublado, ¡Que día tan
perfecto para celebrar una boda!- Anda a buscarlo a mi casa, por la noche
supongo, y ahí hablamos
—Esta bien -Georg asintió
también con la cabeza, se puso el gorro de su poleron y se dispuso a abrir la
puerta- ¡Hey Tom! -este lo miró- ¡Sacate una foto con el traje de pinguino!,
¡Debo ver eso!, te veías tan gracioso en nuestra graduación, ¡Necesito reírme
un poco!
—¡Jódete! -Tom rió un poco y le
levantó el dedo del medio, antes de desaparecer tras las puerta y sin la peluca
Salir había sido fácil,
extrañamente el guardia no estaba, por lo que se subió a su auto y salió
simplemente.
—¿Te he dicho que eres
maravillosa? -abrazó a su madre, fuertemente- Siempre piensas en todo
—¿Te he dicho que te conozco como
si fueras mi hijo? -Tom la miró mal, mientras se separa de golpe
—Se supone que soy tu hijo, creí
que habíamos dejado el tema de la adopción atrás, recuerda -dramatizó, haciendo
reír a su madre
—Oh claro que tonta -siguió
riendo ella- Entonces te conozco, eres mi hijo Tom
—Lo sé -presumió- Pero ahora, te
devolveré el dinero del traje de pingüino espérame un momento -sacó su
billetera, pero su madre lo detuvo
—¿Debo recordarte que sigo
siendo tu madre jovencito?, tengo el derecho de comprarte lo que sea -hizo que
guardara su billetera- No me debes nada, tontito, ahora anda a bañarte y
arreglarte, a ver si comes algo antes de irte -Tom asintió- Debes ir a la casa
de Viviana a las 3, ahí te estarán esperando
Su madre, siempre pensaba en
todo, y lo conocía tan bien.
Le había comprado un traje y
conociéndola le iba a quedar perfecto, ¡Simone era la mejor!
Dos horas mas tarde, había
comido, y se estaba arreglando, la molesta y pequeña corbata negra.
Al terminar, se arregló el
cabello, con sus manos, chequeó sus zapatos y se puso sus lentes
—¿Cómo estoy? -preguntó a su
madre al bajar las escaleras
—Muy guapo, si yo tuviera
dieciocho años menos, saldría contigo -ambos rieron
—Yo diría que más eh -la
molestó- Bien debo irme, te quiero Simone
—Yo igual hijo, cuidate.
Tomó un taxi, hacia el norte de
la ciudad, mientras trataba de ordenar sus pensamientos.
_________ y su enojo, Viviana y
sus mentiras, su mejor amigo, el instituto, su vida, su 'trabajo', sus estudios
y su padre.
Diablos, debía organizarse bien.
Mientras más se acercaba al
barrio en donde vivía Viviana, más nervioso estaba y no tenía ni idea porqué.
Que él recordara, sus padres no eran tan horribles ¿o si?
Los recordaba, bastante
amigables, pero tenían cierto problema de ego. Y bueno, teniendo esa gran casa,
esos grandes lujos, era imposible no ser egolatra y creerse de la gran
sociedad.
Se bajó del taxi, se puso sus
lentes, y se acomodó la chaqueta. ¡Se sentía horrible con el traje!
En realidad, el traje de
pinguino -cómo solía decirl él- era lindo y tenía estilo, pero se sentía
aprisionado, y atrapado, ¡Nunca le habían gustado esos trajes! Con suerte en su
graduación había utilizado uno y a medias porque se había negado a usar esos
zapatos que su profesora le había insistido que le quedarían geniales,
sorprendiendo así a todos en la ceremonia, cuando fue a recibir su diploma, con
sus converse favoritas.
"Estoy afuera, Tom"
Envió el mensaje y segundos
después, la puerta se abría y una figura conocida se hacía presente.
Llevaba un vestido corto, de
gasa de un color rosa muy pálido y contrastaba con su piel blanca, se
veía...linda.
—Hola amor -lo abrazó ella-
Estás muy guapo -rió, y el no pudo evitar sonreír...un poco
—Hola Viviana -habló él también-
Estas muy linda también
—Gracias -ella le sonrió- Ahora
entremos, que mis padres estan preparando los ultimos detalles, la boda se
celebrará al aire libre, y luego iremos al hotel San Lucas -si que irían lejos
—¡Hola señor Collins! -saludó
con el mayor sarcasmo de su vida
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Cruzó sus brazos teniendo
cuidado de no quemarse, se apoyó sobre la parte delantera del auto y suspiró
estresada. Ni el maldito cigarrillo podía calmarla, y eso le demostraba lo puta
que era, al dejar que las emociones la aprisionaran una vez mas.
Ella no sentía nada, había
creado una capa de hielo, quizás no muy fina ni muy gruesa, pero lo
bastantemente fuerte, para evitar encariñarse con muchas personas y para evitar
que alguien la sobrepasara.
¿Que era la pena?, Que era la
angustia?, ¿Qué era la tristeza y la felicidad?
Dolores de estomago, muy
desgarradores.
Esa capa había crecido poco a
poco, despues de que su padre se hubiera ido, y desde ahí se prometió que nunca
se encariñaría con alguien, a veces las personas nos decepcionan y ella no
quería eso, no quería decepcionarse más, no quería necesitar ni querer a
alguien. Por lo que se extrañaba mucho, al sentirse mal, por estar enojada con
Tom, pero, ¡Nadie tenía el derecho de gritarle! y mucho menos, por ella, por Viviana
Collins ¡Qué culpa tenía ella de que su novia, fuera tal puta!
—Creo que deberíamos llamar a
los bomberos, lanzas humo hasta por las orejas -la sobresaltó la voz de Niall,
su mejor amigo, el único hombre que sabría que no la haría sufrir, no la
molestaría por sus actitudes, aunque si la aconsejaría cuando estuviera mal.
Bueno al igual que su Hermano Mellizo, ellos dos eran su vida y sus unicos amigos,
aparte de Nay obviamente.
—Que gracioso -gruñó y aspiró un
poco el cigarrillo- ¡Arregla la llanta! -botó el humo y aplastó, la colilla que
le quedaba- Si estuviera aquí tu hermano, esto no pasaría
—Él es sobrenatural -se agachó a
la altura del neumatico, del auto- Yo soy humano
—Él es mas guapo -lo molestó- Y
mas inteligente -rió graciosa
—¡Me estas hablando enserio! -la
miró- ¡Nos parecemos!, soy su Mellizo -volvió su vista hacia al frente- Y bueno
puede que no sea un gran genio
—¡Claro que no!, ¡Si fueras un
genio, ya estariamos en la fiesta! y no estancados a medio de la carretera
-suspiró y acomodó su cabello- ¿Por que no vino tu hermano?
—No sé -se encogió de hombros-
Salió en la mañana y no volvió, por lo que me dije, Niall tendrás que llevar a
la boba de ojos encantadores que tengo por amiga, a la fiesta y aquí estamos
—Sí serás, tonto -suspiró, y
metió las manos dentro de los bolsillos de su chaqueta- A todo esto, ¿cuando
estará lista mi moto?
—Cuando tenga que estar lista,
mujer -Niall se concentró en arreglar la llanta, y luego de unos minutos
añadió- ¡Listo!
—Era hora -entró al auto,
seguido de él- Ahora ¡Vamonos!
Niall comenzó a conducir, con
destino a la fiesta playera que iban.
_________ miró de reojo a su
amigo y sonrió para si misma. Niall era el menor de los Mellizos que tenía por
amigos, a veces muy despistado, muy tonto, o muy impulsivo, pero en fin era su
hermano, su amigo que la había apoyado -al igual que el otro Mellizo- cuando
estuvo mal. Lo que más le gustaba de aquellos dos chicos, era que no la
sermoneaban, no la criticaban, sólo la protegían y la consolaban cuando había
que hacerlo.
Unos minutos y kilometros mas, y
habían llegado a San Lucas, estacionaron frente a la playa y ________ volvió a
sonreír al ver el ambiente.
Música fuerte, chicos guapos,
gente bailando, arena fina, alcohol por todos lados...
Todo estaba perfectamente dado, para
que ella corriera a Tom de su mente, aunque sea por esa noche.
—No te pierdas eh -le dijo Niall
antes de bajar
—Claro que no
Caminó unos cuantos metros,
saludó con la mirada, a unos conocidos y miró el cielo. Una única estrella se
hacía presente en el cielo, brillaba en su totalidad y ________ se preguntó si
Tom estaría viendo la misma estrella.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Bajó la vista del cielo,
sonriendo ante su deseo.
Su padre, una vez le había dicho
que si veía una única estrella en el cielo, significaba que se le estaba
presentando una nueva oportunidad, y debía pedir un deseo.
Suspiró y se fijó en la fiesta.
Por la tarde se había celebrado la boda, en la playa, una ceremonia linda, pero
muy aburrida y ya por la noche la fiesta se estaba celebrando en ese hotel.
¡Nunca había estado en un hotel tan lujoso!
Pero era de suponerse, la
familia de Viviana, tenía dinero y podía darse esos lujos. Se sentó cansado, en
una mesa y probó un bocadillo, lo único bueno de ahí era la comida.
Recordó que había estado
soportando las charlas del padre de Viviana toda la tarde, y casi quiso vomitar,
más de alguna vez se le había escapado una carcajada al oír el tan gracioso
tono del señor cuando hablaba de su futuro, y más de alguna vez el señor
Collins lo miró mal, pero a él que le importaba.
Observó la hora, once de la
noche y fijó la vista en su novia, la vio bailar muy alegre
-demasiado para su gusto- en
medio de la pista, y frunció el ceño.
¿Alguien notaría si él
extrañamente desapareciera de la fiesta?
¡Nadie!
Se paró decidido, se escabulló
como pudo sonriendole a todos , y salió de aquel hotel.
Miró a ambos lados de la
carretera, ¡Maldición su auto lo tenía Georg!
Cruzó la calle, y se encontró
con la playa, se sacó la molesta corbata y la chaqueta y comenzó a caminar.
—Cualquier lugar será mejor que
este -susurró unos segundos después.
HI! Hoy no hay maratom!! ando con prisa xD espero que les guste y ya salio Niall Horan *-* Mi BeBe .... Bueno que esten bien y cuidense mucho ... Hasta luego
Awwwww estoy egura estan en el mismo lugar.. Siii tieen q estarlo.. Y si estaa vindo la estrella :)
ResponderEliminarSiguelaa Virgi está buenizimaa la fic la amooo al igual q las otra dos :)
Waaaaa a que va a donde mismo que tn ^_^
ResponderEliminarWiii maraton
sigue por favor esta genial